U.D. TALAVERA LA REAL: VICTORIA MERECIDA.

UD. TALAVERA 2 - CD. CASTUERA 1

Después de una semana bastante lluviosa, se nos presentaba un domingo relativamente tranquilo con respecto al agua caída del cielo. El terreno de juego no se encontraba en las mejores condiciones, dos semanas calléndole agua y que estaba super blando. El tiempo acompañó y el partido se disputó sin lluvia.

La jornada se presentaba dura, por la visita de uno de los equipos favoritos al ascenso, el CD. CASTUERA. Equipo que en la ida nos demostró una superioridad bastante grande, tanto táctica como técnicamente. Sabíamos de la importancia de este partido para no pasar problemas al apretarse la clasificación por la parte baja. El equipo visitante baja sus prestaciones a domicilio, y ese factor lo queríamos aprovechar, además de desquitarnos por el repaso que nos dieron en su propio campo.

Juan Carlos dispuso del siguiente equipo:

Flores, Angulo, Juan Luis, Pive, Sergio, Juanma, Nelson, Carlos, Andrés, Roberto y Angel. En el banquillo estaban Fili, Juanlu, Jose Mari y Kiki.

Banquillo ayer.

El partido comienza con el típico tanteo de los dos equipos para ver las intenciones de uno y otro. Los equipos también se debían adapatar a las condiciones del terreno de juego, muy embarrado. El tocar el balón para combinar se hacía complicado por lo resbaladizo del terreno, pues en cualquier momento ibas al suelo. Por parte de los locales se dispuso de una intensidad, ya de sobra conocida, pero que en las últimas semanas la habíamos dejado a un lado. El equipo debía presentar batalla ante uno de los adversarios más cualificados técnicamente del campeonato. El CD. Castuera cuenta en plantilla con dos-tres futbolistas de superior categoría por la técnica que atesoran, destacando su delantero, el número 10.

Jugador nº. 10, el más técnico de todos.

El partido estaba convertido en una especie de corre-calles, siempre los dos equipos en busca de la portería rival, con poco juego combinativo, de posesión, creando muchos ataques rápidos que bien solventaban las defensas contrarias o los porteros. El mayor peligro de los de la ciudad del turrón fueron jugadas a balón parado, sobre todo en corners, bien sacados en su mayoría por su mejor jugador, al que la defensa local tuvo que emplearse a fondo. Destacar un disparo suyo desde 30 metros que es desviado a corner por Flores cuando ya cantaban gol. Por parte de los talaveranos, destacar un par de disparos flojos que bien atrapa el portero, y sobre todo una indecisión entre el central y el portero, a la que Roberto llega para levantarla pero con tan poca potencia que el balón no llegó a portería, esto ya fue al filo del descanso. Así llegaríamos al descanso, con todas las cartas por levantar.

En la segunda mitad entró en el terreno de juego Kiki, nuevo fichaje de la UD. Talavera para lo que resta de temporada, que viene a ayudar ante la gran cantidad de bajas. El equipo necesitaba más músculo en el centro del campo y entró en el lugar de Carlos, gran papel el tuyo siempre luchando y sobre todo intentando dar sentido al juego del equipo.

El partido discurría por los devenires del primer tiempo, ataques rápidos por parte de los dos equipos en los que cualquiera podría marcar.

Destacar la actuación de Flores, que un partido más y, van muchos, nos enseña el espectacular talento que tiene debajo de palos, una garantía de éxito, desquiciando a rivales por doquier.

Grande Flores.

El partido colgaba de un alfiler para cualquier equipo, o el uno u el otro podía marcar y, se veía que el que marcara primero se llevaba el gato al agua. Todo se puso de cara cuando en el minuto 70 expulsan por doble amonestación a un jugador rival por tocar el balón con la mano. Ahí supimos que el partido había que ir a por él, morir en la orilla, pues el equipo fue cuando más empujó. Así, en el 80, un saque de esquina botado magistralmente es rematado por Juanma, impecablemente por la escuadra, este es uno de los goles de cabeza que había que ponerlos en los libros para explicar bien cada movimiento para hacer un remate perfecto. Maravilloso el gol que hacía que el trabajo realizado durante todo el partido tuviera recompensa. Ahora tocaba cerrar el partido, por el tiempo que quedaba había que jugar lo más mínimo, pues el rival tenía cualidades para empatar el partido. Y así fue, cinco minutos despúes, centro desde banda izquierda que no somos capaces de despejar, se queda entre las piernas del defensa y el delantero, al que derribamos facilmente y el árbitro pita penalty sin duda. La pena máxima la transformaría su capitán, con un tiro ajustado al palo, al que nuestro portero llega a tocar pero sin posibilidad de despejar o atajar el balón por la fuerza que llevaba. Empate en el marcador que no hacía justicia por lo puesto dentro del terreno de juego viendo a unos y a otros. Este equipo nunca se rinde, pues ya en el minuto 90 lo seguía intentando pero sin puntería. En una de estas, Flores tiene el balón entre las manos y monta una contra espectacular, lanza un pase desde su área hasta más allá del medio campo, que recoge Miguel, con un rival en la cepa, dándole estopa para pararlo, pero a este jugador si no lo has parado a la primera olvidate de pararlo, como corre el colega. Se planta solo delante del portero y, esta vez si te salió, cruza el balón ante el que no puede hacer nada el guardameta. 2-1 y tan felices, pues quedaba ya muy poco para la finalización del choque. Pidiendo la hora ostensiblemente pero sin llegar a sufrir se llegó al final de un partido, que esta vez sí, supimos llevar a nuestro terreno y disputarlo al máximo. Enhorabuena chavales.